jueves, 19 de enero de 2017

Herido.


Ante tanto dolor, que lo consume como un virus letal, su piel se mantiene suave, desnuda, pero fría de tanta oscuridad, trata de cobijarse, pero es una batalla que le cuesta ganar, son muchas las espinas que envasan la pureza de su espíritu, tan solo un hombre, por fuera no lo ven, pero por dentro, una criatura indefensa, tratando en su más intensa soledad, de sanar.