viernes, 12 de mayo de 2017

Eterna búsqueda.



Ella , oscura, tan solitaria, tan pálida,  rodeada de la compañía de cuervos negros que simulaban un poco ser sus pequeños amigos, igual, se encontraba sola, sus pies diminutos, su vestido pesado y sus lágrimas enfriando cada paso,  solo levantaba la mirada para que un rayo de sol calmara de calor ese dolor que no la dejaba dormir,  no era aquella pequeña que jugaba a imaginar mundos de colores, de golosinas, ya era una mujer, una mujer sola, una mujer necesitada, una mujer de pechos brotados, de labios ansiosos, una mujer de manos vacías, sin protección, cuando su corazón necesitaba de amor, sabiendo que ya no era una niña y solo con los abrazos de sus padres podía obtenerlo, ya no era eso, era más, más fuerte, más turbulento, era un hombre, el que aún no aparece y ella sigue vagando en su tormentosa búsqueda.